Después de muchos años de abandono vuelvo a hacer dieta, y esta vez espero que sea la definitiva. Por el camino ha habido muchos intentos, algunos con más éxito que otros. ¿Por qué ahora y no antes? Porque estaba cansado de todo, harto de que a los gordos nos usen como un cajero automático, y porque no me veía capaz de salir adelante con una nueva dieta, sabiendo que al cabo de cuatro días todo volvería y no habría servido de nada.
En mi última dieta, hace ya casi 8 años, me dejaba 60 Euros a la semana en productos específicos, y en recuperar los kilos perdidos tardé solamente 6 meses. Después de eso, perdí toda esperanza en las dietas milagro, y me juré que no volvería a pagar un sólo euro para perder peso. Bastante me cuesta llegar a fin de mes como para ir regalando dinero.
Pero llega un día en el que te das cuenta que no puedes seguir así. Con 97 Kg, 112cm de barriga y un IMC de 34 está claro que los problemas de salud no van a tardar demasiado en aparecer.
Ahora miro fotos viejas y me veo cuando pesaba unos maravillosos 73 kilos y se me saltan las lágrimas. Hace casi un año que no entro en la ropa de mi armario, y eso que eran todo tallas grandes porque nunca me ha gustado la ropa ceñida. Encontrar ropa de mi talla empieza a ser un problema.
Así que después de un mes añorando tiempos mejores he decidido empezar una dieta. Esta vez sí. Esta vez va a ser la definitiva.
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